La vida después

La vida después es una novela que de momento no tenía previsto leer, pero me hicieron una invitación a un grupo de lectura. Yo que habitualmente voy por libre en casi todo, nunca había leído nada de forma conjunta, así que es mi primera experiencia. Entre las distintas posibilidades escogí este libro porque ya había leído a Marta Rivera de la Cruz con anterioridad y me había gustado, y me alegro de mi elección.
He disfrutado mucho de la lectura, es una bonita novela que trata de las relaciones personales: el amor, el egoísmo,  los prejuicios, la desconfianza, pero sobre todo de la amistad, en torno a la que gira toda la novela. La amistad verdadera entre un hombre y una mujer, Jan y Victoria, que comienza en la universidad y va más allá de la muerte de Jan. Una amistad que se consolida con el paso del tiempo con todas sus consecuencias, buenas y malas.
Los personajes están muy bien perfilados, son personas como las que tratamos todos los días. La percepción que tenemos de ellos al principio va variando,  descubrimos que no todos son como parecen ser al principio, que hay inseguridades  y miedos donde aparentemente hay seguridad, y valentía y solidez donde parecía haber debilidad. No todo es blanco o negro, los personajes evolucionan, reflexionan, se hacen conscientes de sus carencias, de sus errores, también de sus virtudes, y se complementan.
Hay además historias secundarias a la principal, pero siempre con el mismo trasfondo de amistad y amor, alguna tan bonita que, leyendo,  a veces daban ganas de que continuara y no volver a la trama principal.
La vida después es una novela de lectura muy fluida, que deja un buen regusto, un regusto optimista a pesar de que comienza con un fallecimiento.
Me gusta mucho como escribe Marta Rivera de la Cruz, me parece una escritora de un gusto exquisito, elegante, suave y sencillo. Todo lo que he leído de ella hasta ahora me parece muy recomendable, y por supuesto también La vida después .