Mi vida, como la de mucha gente se rige por años naturales, pero sobre todo por años académicos, y el fin de curso me afecta en todos los aspectos: laborales, familiares ...Además, también tengo un fin de curso de patchwork, porque de octubre a junio un grupo de amigas nos reunimos todos los lunes, en lo que parece un gallinero, para hacer patchwork. Esa es la excusa, en realidad es para reírnos y merendar y si queda algo de tiempo, a lo mejor cosemos algo.
A lo que iba, el miércoles hicimos la comida de fin de cuso y tuvimos dos regalitos, que con todo cariño nos prepararon Lorena y Carmen, son estos dos preciosos broches tan alegres y primaverales.
Qué envidia me da esta entrada. Yo quiero tener un grupo de amigas para cotill... digo coser, jeje
ResponderEliminarBssssssss
Cloti
Y a mí.....también me da envidia como dice Cloti.......los broches preciosos....suertuda jajjaja......Besitos.
ResponderEliminarPero qué bien que puedas reunirte con las amigas para charlar y coser (cuando coseis, claro!!!). Y esos broches... lindisimos!!! A lucirlos bien!!
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